Oda al colchón de muelles

Como echo de menos aquel colchón de muelles, el que te abrazaba hundiéndose bajo tu peso,.¡ Que tiempos !, en los que hasta sentarte en él para descalzarte era placentero, te sentabas y engulléndote suavemente parecía que impulsaba tu pie hacia arriba como para ayudarte a quitarlos, eso era un amigo, no este nuevo colchón de carácter agrio y siliconado que te sientas en él y con la excusa de mantener tu espalda recta te deja tan tiesa que el zapato a quitar te parece a cien años luz.

Y su cercanía, en él todo era cercano, la mano del otro en tu ojo, la rodilla presionando tu espalda. Ahora todo es distancia ;  - ¿ estás ahí ? . - Sí. - Pues dame un grito y nos vemos en el medio.
Que a veces cuando llegas ya ni te acuerdas a que has venido.

Y cuando querías darle la vuelta, sólo tenías que tirar hacia ti  y alehop subía y caía del otro lado dispuesto a recibirte sin más, que ahora hasta miedo te da hacerlo sola, que empieza con sus movimientos sinuosos de viscoelasticidad y por mucho que intentes hacerlo lo único que consigues es que si cae sobre ti  tengan que venir los servicios de emergencia a rescatarte de una masa envolvente que no hay manera de quitarse de encima. Razón tenían los operarios de la tienda cuando lo trajeron a casa y al acercarme a él en el pasillo me gritaron : ¡ No se acerque mucho Señora, tiende a deslizarse !.

Y su “ ñiki ñiki “ , que te animaba cada vez con más ritmo, música celestial se te atonjaba aquello, pero eras tú u otro el que se movía, y él te seguía, rechinando de placer. Ahora es mudo, que hasta gemir te da miedo por si se molesta en su atronador silencio, y si de pronto oyes algún ruido parece que te esté diciendo “ ajustame la tablilla tres hasta el nivel dos o el sistema ergonómico desaparecerá y la quinta vertebra se verá dañada ”, que te entra un pánico “ vámonos al sofá “ , mil doscientos euros son muchos para estropearlos por un meneo.

¡ Oh, adorado colchón de muelles, amigo fiel de descanso, revolcones y sentadas,donde quiera que estes, regresa a casa, de la que nunca debiste salir !

Nota: Imagen tomada de la red.