Diálogo de besugas o no

Hoy, camino de la sucursal bancaria me encontré con mi amiga Rosy como tantas mañanas ultimamente.Y no es que tantas mañanas vaya al banco, es que muchas mañanas me encuentro con mi amiga Rosy. Es una mujer alegre, habladora y con un buen talante.

Nuestra conversación suele girar sobre cosas cercanas; los hijos, la familia,alguna dolencia que otra, y un poco de actualidad de esa que todos comentan, me refiero a la más resaltada el día anterior o este en los medios de comunicación, vamos, nada del otro mundo, pura cotidianeidad. Un poco de gripe A, la beca on-line del ministerio de educación ( esto merece un post aparte, vaya tela ), lo caros que están los piñones, lo jóvenes que se conservan los maridos ( aquí fantaseamos un poco), y por supuesto la preocupación personal de cada una ese día.

Pero hoy andaba ella molesta por cosas de la publicidad, metidas de lleno en esta vorágine de bolsas recicladas y medioambientales en la que nos encontramos decidió comprarse una bolsa, una de esas que ofertaba un supermercado de la zona. Una bolsa rectangular fabricada en tela, asa ancha que facilita su transporte y una base resistente para soportar peso.
En casa desde siempre hemos usado carrito para la compra por lo que esta nueva medida no nos supone ningún esfuerzo y además nos parece bien.
Pues venía ella rezongando que se dice por estos lares y que según la RAE es: " Gruñir, refunfuñar a lo que se manda, ejecutándolo de mala gana ". Y sí, algo así hacía ella.
Su malestar no era otro que la inconveniencia de que la bolsa llevará serigrafiada la imagen comercial del establecimiento que para ese fin la vendía. Porque yo la pago alegaba ella y ahora he caído en la cuenta de que sólo podré usarla allí o me arriesgaré a que todos los ojos se fijen en mi al entrar en otro establecimiento.

- Pero eso no es nuevo, Rosy. Vivimos en un mundo de hombres y mujeres anuncio.
- ¿ Qué quieres decir ?
- Ahora mismo, tus gafas llevan impresas "Ray-man", y bien orgullosa que las paseas.
- ¡ Es que son de marca !
- Y la bolsa también.
- Pero no es lo mismo, estas gafas me han costado carísimas. Y la bolsa sólo tres euros.
- Bien, entonces tu problema no es la publicidad sino el precio que has pagado por ella. Siempre podrás ir al comercio y pagarle de más al propietario por tu bolsa y así podrás pasearla tranquila sin riesgo a que te miren.
- Pero mis gafas tienen un diseño.
- Y la bolsa también.

He de decir en favor de la bolsa, que tiene un tamaño perfecto para su utilidad, buen material, colores vivos y un simpático diseño, pero la pobre ha costado tres euros y está condenada a vagar entre tarros de tomate frito y barras de pan con cereales. Pobre bolsa, de haber nacido en " Pragda " o en " La corte del inglés " ahora andaría incluso en recepciones oficiales balanceandose de algún hombro famoso o aristocrático.
No nos importa ser hombres y mujeres anuncios, eso sí, con una única condición, que nos cueste carísimo. Sí, sí, ya se que aquí saldrán los defensores del diseño, la idea y la calidad del material, pero a veces esto no es acorde con la realidad.
Pagamos verdaderas barbaridades por llevar en nuestros pies zapatillas de deporte de tal o cual marca con bandera americana o alemana fabricadas en países orientales a un bajo coste.
Que las gafas que nos ponemos y que pagamos a cifras a veces astronómicas para el género lleven impresas el nombre del diseñador - lo que contribuye a una publicidad gratuita para este - nos llena de orgullo y nos hace fardones.
Sin embargo, que una barra de pan suba 000,1 de ctmos - que muchas veces no lo gana el productor- nos hace poner el grito en el cielo.
Mi hija ha pagado 10 ml de perfume a precio de caviar iraní, y os juro que si no lo agota rápido, me lo beberé. Y la miro siempre que se perfuma, y juro que no le ha salido una halo especial ni nada de eso, no lo entiendo.

Perdón, había dejado olvidada a Rosy.

- Pues no sé,Rosy. Se me ocurre que la decolores, o la forres con un bonito papel de diseño.
- Me lo pensaré, la verdad es que me gusta y me soluciona el problema de la compra, ya veré. Mira, ¿ no es aquella Marisa ?.
- Sí , lo es.
- Marisa, Marisa.
- Hola, chicas, ¿ qué tal ?
- Bien, aquí comentando un rato.
- Oye Rosy, que bolsa más chula y que cómoda, ahora no molestarán en los dedos por el peso.
- Pues sí- mirándome de reojo- es barata y además tiene un bonito diseño.
- Creo que me compraré una.
- Bueno chicas tengo que irme. Que a ver si con tanta charla voy a llegar a casa con la bolsa vacía.
- Adiós, adiós, hasta mañana.

Allí nos quedamos Marisa y yo viendo como se alejaba.
- Parece que está especialmente contenta hoy.
- Sí, es que se ha reencontrado con su bolsa.
- ¿ Cómo ?
- Nada, pensaba en voz alta. Un beso guapa, ya nos veremos.
- Adiós.

Nota: La imagen del post es obra y diseño de la autora del mismo, cansada de pedirle al todopoderoso Google, sin éxito, una imagen de besugas, se vio obligada a recurrir al siempre socorrido Paint que soporta estoicamente su poca habilidad para el dibujo.

Anexo de nota(qué bonito ): Para los que ya lo hayan leído como "Diálogos de besugas ", decir que me he permitido cambiar el título del post por el que había pensado en origen ya que no terminaba de verlo así. El título será: Diálogos de besugas o no.Perdonen las molestias.