viernes, 2 de octubre de 2009
Moisés y el despertador
Lo apagó. Momentáneamente, pues aún sonaría una vez más.
Estaba harto de aquel despertador, día tras día le hacía salir de sus sueños para volver a la realidad. Desde hacía tiempo él ya era capaz de oír aquel sonido desde el suave arranque hasta el agudo y penetrante pitido final.
En los últimos tiempos, alguna vez llegó a pensar que había un tono burlón en aquella forma de sonar.
Como hacía siempre, se giró sobre si mismo hacía el otro lado de la habitación en un intento de recuperar el sueño perdido.
No pudo. Se levantó y apretando el botón pensó; hoy ganas tú, pero mañana...
Estaba decidido, al salir de la oficina entraría en aquel bazar y compraría un nuevo despertador, ni un solo día más aquel conocido sonido interrumpiría su sueño.
Después de haberse duchado tomó un pequeño desayuno y se dirigió al garaje en busca de su coche. Como cada día al entrar en él, bajó la ventanilla y miró la hora en el reloj digital del cuadro. Marcaba las 06:50h , iba bien, en diez minutos estaría frente a la puerta del trabajo y aún tendría tiempo de tomar el último café antes de fichar.
Le pareció que el día tenía una calma distinta, ¿ es posible qué aquel reloj adelantara ?, y por eso la calle se encontraba inusualmente vacía. Miró su reloj de pulsera, la misma hora.
Aparcó, extrañándose de la facilidad con la que había encontrado un lugar libre y se bajó.
Todo parecía distinto. Incluso la cafetería tenía sus puertas cerradas. Que extraño, pensó.
Alvaro , el kioskero al que cada día compraba el periódico le saludo con la mano. Se dirigió hacía él.
- Buenos días , Alvaro . Parece que hoy la gente no piensa despertar.
- Ya se sabe, los domingos no suenan los despertadores. ¿ Y cómo tú por aquí?
- Un asunto de familia - disimuló- mientras ojeaba la portada de un periódico local.
Era domingo.
Aquel viejo despertador le había ganado la batalla, aún se burlaría de él un día más.
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Es el tiempo el que no deja de burlarse de nosotros.
ResponderEliminarUn gran saludo.
SABES QUE ES LO QUE MAS NOS MOLESTA DEL DESPERTADOR ?.
ResponderEliminarQUE NOS RECUERDA QUE NO NOS ATREVEMOS A SER LIBRES.
BESOS
suso
Suele pasar, el inconciente juega malas pasadas y eso nos ocurre cuando no cambiamos la hora del despertador o sencillamente lo apagamos, antes de acostarnos, andamos en automático que fustración
ResponderEliminarA mi me pasó algunas veces........jjjje. Y como j.....pero me di cuenta a tiempo y me volví a la cama (las6)
ResponderEliminarBexinos y buen finde.
Hola a todos.
ResponderEliminarPues sí, los relojes son como un pequeño ejercito del tiempo marcando el paso de las horas continuamente.
Y algunos tan famosos que hasta han hecho historia:
- El Big Ben de la torre de Londres
- Los relojes, de Agatha Christie.
- Reloj no marques las horas...porque voy a enloquecer y tu tic tac me recuerda...
- Din Don, el simpático mayordomo en La Bella y la Bestia.
- La saga Rolex
Etc etc
Besos
YoSusan:una buena descripción y divertido desenlace...el tiempo como casi todo...¿O absolutamente todo? no existe. El humano ha creado su propio despertador...ahora habría que saber quién creó los sueños y realmente quién nos maneja, controla y ajusticia...jajjjaja me estoy poniendo simpático.
ResponderEliminarBesitos dulces
A mí me ha pasado algún sábado, despertarme sobresaltada esperando escuchar el sonido del reloj que no ha sonado, para ir a trabajar
ResponderEliminar...¡y nunca he trabajado los sábados!!
No me gusta madrugar. El bip bip bip del reloj por las mañanas es uno de los sonidos que más odio. Arggg
Jajajaja
ResponderEliminarMe ha encantado el relato, y esa burla final del malvado despertador.
Sabe Dios que me siento totalmente identificada con el bueno de Moisés.
Un abrazo y feliz fin de semana.
Muy bonito relato. A mi me pasó algo parecido en el último viaje a México. En este caso, confié en el despertador del hotel, y como yo no cambio mi horario del reloj pulsera, confié totalmente: Estaba una hora adelantado, de manera que al otro día, el despertar me lo viví como Moises!.
ResponderEliminarUn abrazo amiga... y que sigan sus relatos!!
¡ Que alguien apague ese despertador !
ResponderEliminarSaludos para todos
Los sábados y domingos me despierto y me espanto de que mis papás no me han llamado a despertar: ''¿Qué acaso se quedaron dormidos? ¡Llegaré tarde a la escuela!'' Me quedo un rato y digo: ''Soy una tonta, hoy es fin de semana'' ¡Y esto sucede siempre!
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